JULIO, JUPITER y JUEVES
El nombre Julio/a deriva del latín Julius, y designaba inicialmente a un miembro de la familia Julia, una de las familias patricias de la antigua Roma, a la cual pertenecía Julio César. Luego pasó a designar uno de los meses del calendario, así como Augustus (el primer emperador romano, heredero político de César) lo hizo con el mes siguiente, siendo una manera de homenajear a ambos.
Una leyenda plantea que la familia Julia se originó en Yulo (Iulus) o Ascanio, hijo de Eneas, el mítico troyano progenitor del pueblo romano y ancestro de Rómulo y Remo, los también míticos fundadores de Roma.
Otra etimología lo relaciona con Jovilios (perteneciente a Júpiter, su descendiente), derivado de Jovis, que ha dado en castellano Jueves, el día vinculado con el dios y el planeta Júpiter. El adjetivo jovial (alegre) proviene justamente de Jovis a través del italiano gioviale. Su sentido inicial es individuo nacido bajo el influjo del planeta Júpiter, el dios principal entre los antiguos romanos (equivalente del Zeus griego). Esta asociación remite a la antigua creencia que asociaba los comportamientos y destinos humanos con la influencia de los astros. De allí, por ejemplo, las voces desastre (literalmente mal astro, es decir, desgracia producida por un fenómeno celeste), marcial (influenciado por Marte, el dios de la guerra), saturnal o saturnino (influido por Saturno).
Jupiter es una palabra compuesta por Jovis y pater (padre), equivalente de Dios padre, ya que Jovis se origina en el indoeuropeo deiw- (brillar). Jovis era el dios del cielo iluminado, claro, brillante.
Dios precisamente proviene del latín deus, que a su vez se origina en el indoeuropeo deiwos, que en griego dio Zeus.
Comentarios
Publicar un comentario