DESOLADO y SABER



La voz desolado (destruir, desvastar, dejar solo) deriva del latín desolare, palabra compuesta por el prefijo de- (que en este caso significa "muy, completamente" y no "sin", como suele suceder en otros casos), significando "abandonar, volver desierto, dejar solo".




El sentido negativo del prefijo de- aparece en la voz latina desipiens, participio presente del verbo desipio "estar loco, delirar, hacer o decir extravagancias. La parte sustancial de tal palabra es el verbo sapio: "tener sabor, oler, saborear" y también "tener juicio, inteligencia, entender". Allí aparecen los dos sentidos de este verbo que en castellano ha dado saber. Por un lado, refiere a la capacidad gustativa y, en segundo lugar, por extensión, a la capacidad cognitiva. Con este sentido debemos entender la expresión nulla rem sapere: ignorarlo todo.

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